NUESTROS ORÍGENES, MÁS DE 150 AÑOS INNOVANDO
En España existen cerca de 40 empresas, según el registro mercantil, cuya fecha de fundación se remonta al siglo XIX, un dato especialmente significativo, si tenemos en cuenta que la vida media de las sociedades de nuestro país se sitúa un poco más allá de los 11 años de vida. Carretillas TR es una de las pocas compañías que han superado los 150 años y que cuenta con el privilegio de que nuestra actividad, se ha venido desarrollando a lo largo de tres siglos distintos.
El nacimiento como empresa se remonta a 1867, cuando Vicente Ribas Partagás un barcelonés de familia trabajadora, que se dedicaba al transporte de distintas mercancías por la zona portuaria de Barcelona, firma el primer contrato, en aquella época fruto de un simple acuerdo verbal, con la compañía de Gas y Electricidad con el objeto de transportar el carbón que llegaba al puerto de la ciudad para la fabricación de gas ciudad. Para el inicio del negocio, el fundador de la empresa contaba con dos caballos percherones, una raza originaria de Normandía que destaca por su fuerza, y que durante el S XIX se utilizaba para tirar de los coches pesados utilizaos para el correo en Francia. Además de los equinos, disponía de un carro de transporte, así como otros carros para el transporte de carbón a granel y vehículos de cuatro ruedas capaces de trasladar piezas de gran dimensión.
En aquella época, Catalunya se encontraba a las puertas del inicio de una etapa conocida por “la fiebre del oro”, unos años de gran prosperidad, que vinieron marcados por la aparición de la filoxera en Francia, que afectó a sus cultivos vinícolas, lo que favoreció a los productores catalanes, hasta que la plaga se fue trasladando a territorio catalán. Durante estos años, la burguesía catalana empezaba una etapa de prosperidad, marcada por el florecimiento de la industria metalúrgica y textil, en el que se vivía un particular proceso de industrialización, con la mecanización de parte de la industria, la transformación de los centros de producción y el inicio de la utilización de la energía hidráulica, en sustitución del vapor. Asimismo, es durante aquellos años del siglo XIX, que se empiezan a trasladar los centros de producción a las conocidas colonias industriales, situadas principalmente cerca de los ríos. Por otra parte, en el mismo año de fundación de nuestra empresa, nacen personajes tan relevantes, como el compositor Enrique Granados o Vicente Blasco Ibáñez.
Por su parte en Europa, en 1867, se celebraba en París la Exposición Universal, auspiciada por el emperador Napoleón III, gran impulsor del proyecto, que con la celebración del evento perseguía mostrar al mundo la grandeza del segundo imperio francés.
Los más de 150 años de vida que nos contemplan nos distinguen como empresa, y nos dotan de una personalidad, que ha estado forjada gracias al esfuerzo de muchas personas pertenecientes a varias generaciones, que con su compromiso han contribuido y han facilitado nuestro recorrido. Es evidente, que desde los primeros carros tirados por caballos hasta las carretillas eléctricas de última generación existe un salto muy importante, proporcional a los años que separan ambos “sistemas” para mover mercancías, pero si algo ha distinguido a nuestra compañía desde su fundación, es su capacidad para ser pioneros e innovar para poder ofrecer al mercado, en cada momento, las propuestas más vanguardistas. En pleno siglo XXI afrontamos nuevos retos, teniendo a la automatización y robotización como punta de lanza de una evolución que resulta imparable, un nuevo salto adelante de nuestro sector, para el que, una vez más, ya estamos preparados.